viernes, 13 de marzo de 2009

Entonces ahí estaba,

comenzando a recordar cómo fue que comenzé a quererte.
Y cómo es que ahora no te encuentro.



A cambio encontré tu ausencia y un mate amargo.

1 comentario:

  1. Bonito escrito.

    Gracias por pasarte por mi blog. Estaré encantado de volver a visitarte.

    Un saludo.

    ResponderEliminar